Resuelto

Caso Wanninkhof-Carabantes

La historia del mayor error judicial de la crónica negra española y la resolución gracias al ADN.

Galería Clave del Caso

Rocío Wanninkhof y Sonia Carabantes
Rocío Wanninkhof (izq.) y Sonia Carabantes (dcha.).
Dolores Vázquez
Dolores Vázquez, condenada injustamente.
Tony Alexander King
Tony Alexander King, el verdadero asesino.

El Primer Crimen: Rocío Wanninkhof

En octubre de 1999, la joven de 19 años Rocío Wanninkhof desapareció en Mijas (Málaga) tras despedirse de su novio. Su cuerpo fue encontrado semanas después con nueve puñaladas. La Guardia Civil, sin pruebas concluyentes, centró sus sospechas en el entorno familiar. La presión mediática fue brutal y buscaba un culpable claro.

El Error Judicial: La Condena de Dolores Vázquez

La investigación se desvió hacia Dolores Vázquez, quien había sido pareja sentimental de la madre de Rocío, Alicia Hornos. A pesar de no existir ninguna prueba biológica que la incriminara, un jurado popular, fuertemente influenciado por un juicio mediático que la presentó como una mujer "fría, calculadora y vengativa", la declaró culpable en 2001. Fue condenada a 15 años de cárcel. Pasó 519 días en prisión por un crimen que no había cometido, en lo que se considera uno de los mayores errores judiciales de la historia de España.

El Segundo Crimen y la Pista del ADN

En agosto de 2003, la tragedia volvió a golpear la Costa del Sol. Sonia Carabantes, de 17 años, fue asesinada en Coín, a pocos kilómetros de Mijas. Este nuevo crimen, con similitudes con el de Rocío, fue el que, paradójicamente, arrojó luz sobre el primero. En la escena del crimen de Sonia se encontró una colilla. El análisis de ADN de esa colilla coincidió con el de un resto biológico hallado en la escena del crimen de Rocío Wanninkhof años atrás.

"El ADN no miente, y el ADN decía que el asesino de Sonia era el mismo que el de Rocío. Y ese ADN no era el de Dolores Vázquez."

La muestra de ADN pertenecía a Tony Alexander King, un ciudadano británico que vivía en la zona y que tenía un largo historial de agresiones sexuales en el Reino Unido, donde era conocido como "el estrangulador de Holloway".

Justicia y Legado

La detención de King demostró de forma irrefutable la inocencia de Dolores Vázquez, que fue puesta en libertad. Tony King fue condenado a 55 años de prisión por los asesinatos de Sonia Carabantes y Rocío Wanninkhof. El caso dejó una profunda cicatriz en la sociedad española y abrió un intenso debate sobre el papel de los juicios mediáticos, el funcionamiento del jurado popular y la necesidad de basar las condenas en pruebas científicas y no en prejuicios.